martes, febrero 21, 2006

Número Dos is Blind


Queridos pocos y escurridizos lectores, lamento comunicarles que estoy quedando ciega. El fin de semana me las di fallidamente de cool y confiando en unos lentes Dolce & Gabanna (por supuesto no de mi propiedad) me planté starring at the sun. Confiaba yo en que mi cualidad de Negra de ojos negros me salvara de todo estos vaticinios de cáncer a la piel e insolaciones varias que anuncian los matinales día tras día a falta de noticias de verdad. Lamentablemente, la esclava Tomasa estaba equivocada, iba a decir Isaura pero Natalia ya me aclaró que Isaura es: blanca, casta y pura, así que claudiqué.

La pobre de mí, el día domingo se levantó con un fuerte ardor en la carita y con una marca tipo mapache que dejó el paso de los Dolce. Desesperada, bajo el fiel lema de la estética ante todo, tomé sol nuevamente para ver si emparejaba el descalabro. Resultado (2): Díaz quedó ciega cual Topacio.

Se acuerdan de Topacio, interpretada magistralmente por Grecia Colmenares (qué esperaban sus padres que hiciera esta pobre niña con su vida, con ese nombre o era artista o era vedette) y Víctor Cámara en el papel de Jorge Luis (alguien tiene una explicación convincente de por qué los venezolanos se llaman entre ellos por los dos nombres). Espero sus respuestas, Evelyn Alejandra y Natalia......natalia guachita no tiene segundo nombre.

Topacio era la historia de una campesina invidente que conoce a Jorge Luis, un heredero galán citadino. Durante la trama ultra circunbirúmbica creo que la ciega recupera la vista a lo menos tres veces y después la vuelve a perder, le da amnesia, se extravía , la encuentra Sirilo, su noble amigo que sufre retardos mentales, y después se vuelve a reencontrar con el amor de su vida quien le dice que la ama a pesar de que esté ciega como TOPO....y entonces, música de pajaritos y finales de teleseries TVN, en uno de esos desenlaces que tanto gustan a número uno, Topacio recupera la vista, gracias a la fuerza del amor, of course.

Si alguna vez alguien encuentra la colección en DVD de esta telenovela (acuérdense así se llamaban en los ochenta, las teleseries aparecieron hace poco) juro de guata que se la compro, sólo para escuchar la canción de Carlos Matta...

Qué porque te quiero.

Qué por qué te quiero
Son mil cosas a la vez
Es estar contigo
Es buscar tu abrigo
Es un no sé qué.

Qué por qué te quiero
Culpable es tu corazón
Inventaste un sueño
Donde soy tu dueño
Tu luna y tu sol.

La pregunta que asalta mi pequeño y reducido universo es qué haremos si pierdo la vista, digo haremos porque sé y confío en que ustedes queridísimos lectores no podrán vivir sin mis hilarantes intervenciones... ¿Alguien me querrá ciega?...Sé que muda probablemente sí, de hecho es el sueño confeso de muchos machos que me ha tocado conocer, pero estoy segura que ciega nadie me va a querer. Sin la agudeza de mis palabras rápidas hasta mi comunicación cibernética con el chico rucio que roba mis horas de sueño se ha visto dificultada porque no puedo chatear correctamente, el fondo blanco me hace doler los ojos, lo que hace que me demore mucho en leer y si a eso se le suma que debo contestar pareciendo lo más cool posible....FRACASO...Lo único bueno es que como miro tan de cerca el computador muchos pedestres que pululan por mi cubículo han pensado que trabajo en serio.

Además siendo sincera, si ya soy Torombola con la vista en buen estado, imagínenme ciega, episodios como mis dos consecutivos y parafernálicos (llanto incluido) extravíos en medio del descampado boliviano, mi ultra recordada experiencia con una cocina a gas que dejé encendida todo una noche haciendo casi estallar en llamas limonares (insisto a mi me dijeron que sacara las pizzas del horno, nadie mencionó que después debía apagar el horno) y tantas otras oportunidades en que me he tropezado en público, roto cosas (léase gorro Shangai de Alexis) y perdido otras (recordar pasaporte en la frontera de Bolivia), se multiplicarían por mil.

Hay de mí si no recuperó la visión en un 100%, creo que mi final no será como el de TOPACIO...Bueno, a menos que número uno termine de adoptarme como hija bastarda y me compre una correa verde limón como la que le pone a pepinillo.

Nota al pie: Número tres a ti no te pediría que cuidaras de mi por nada del mundo. Primero porque sé te daría plancha andar de lazarillo y segundo porque asumámoslo el par de pavas moriríamos atropelladas por un camión a los cinco minutos.

Número Dos

8 comentarios:

Número 1, Número 2 y Número 3 (artista invitada) dijo...

Perdón por la inserción tan ad-hoc de la foto de Grecia, ah?

N°1, camino a la perfección visual. Ojo, pronto tendremos audio on-line.

Anónimo dijo...

Negra yo-yo y egocéntrica...falta que cuentes "Díaz va al baño", "la jornada laboral de Angela", "Número dos con dolor de guata"...

Y màs encima te extrapolas con pelìculas, monitos animados y ahora más encima con teleseries venezolanas ja, ja, ja...te pasaste!!

En cuanto al texto, te cuento que si tu quedaras ciega yo feliz te saco a pasear, te describirìa los lugares, a los minos, te leerìa libros, los diarios....es màs....cuidaría hasta a tus amiguitos cieguitos. Y todo con un procentaje mínimo de accidentes.

Lo que pasa es que tú te quedaste con el mal recuerdo de esa vez en que en un antro proteño me dejaron cuidando las cosas y Centellas en un momento de distracciòn y por efecto de un mal ron, le robaron todo....

bueno, pero si los aviones se caen...centellas tb puede cometer un error

Anónimo dijo...

Doy fe de que si número 3 te cuidara, algo malo pasaría pronto...muuuy pronto.

Por lo mismo me encargo yo de cuidarla. Ya conozco el empeñón que una micro en la V región la dejó en ridículo frente a unos admiradores.

Mejor, yo mismo me puedo rajar con la correa verde, ya que Nº3 ya con una carga, le basta y le sobra.

Número 1, Número 2 y Número 3 (artista invitada) dijo...

Estimados lectores:

Me está saliendo salado el símil con la Topacio...hoy cuando son las 17:39 horas, luego de escribir mil memos, cartas y cheques, debo reconocer con honestidad que me duelen terriblemente los ojos y que veo todo más borrosos que la cresta..

Ayudaaaaaaaaaa

Número dos

Anónimo dijo...

Yo estuve en otro carrete donde a número tres perdió la cartera de la paula...o no?

Número 1, Número 2 y Número 3 (artista invitada) dijo...

Estimado Hocico de tarro:

Es el mismo carrete, sólo que número tres prefiere disimulare l cuento hechándole al culpa a un mal ron cunado en realidad perdió todas las coasa de Barvo Concha porque se puso a coquetera con un chiquillo y se olvidó del mundo.

Mientrsa la pobre número dos se encontraba prisionera en la casa de kum Kum tratando de DESCIFRAR teoría tres.

Anónimo dijo...

Bueno y tb està la vez cuando estudiaba arquitectura y se me quedò mi croquera arriba del bus (perdì el trabajo de dos meses), cuando se me quedaron las llaves puestas en la cerradura del depto, cuando se me olvidò ir a buscar a Joaquín (mi sobrino) al colegio, cuando se me quedaron mis lentes de sol (marca chanchis) en el hostal de La Paz, cuando perdì (con culpa compartida con negro Lara) la càmara fotogràfica de la Pancha en La Paz, cuando se me quedò el bolso con los cuadernos en la camioneta de mi papà y ya estaba subida en el bus y tuve que bajarme y tomar un taxi para alcanzar a mi viejito que se iba a la pega, cuando iba saliendo con pantuflas al colegio (me pasò millones de veces...ja,ja, ja), cuando me pierdo en las calles de todos lados de Santiago y del mundo (no tengo desarrollado el sentido de la orientaciòn)y bueno...podrìa estar hasta mañana contando mis pasteles...creo que tendrè que no sòlo tendrpe que replantearme la posibilidad de cuidar a la negra Topacio sino que cuidar a cualquier ser viviente de este planeta.

Número 1, Número 2 y Número 3 (artista invitada) dijo...

Díaz:
Fairlie ya tiene una creatura a su haber... por qué le quieres agregar otra? Y si fuese así, exijo un seguro contra catástrofes (naturales y provocadas) de por vida.
Firma,
N°1, madre soltera y en vías de adopción